sábado, 9 de mayo de 2009

Mad

Cuando un niño se asoma por los ojos de los apartamentos
Cae
Una luz mortecina y ámbar
Sobre las mariposas de la seda.
Mad da por respuesta la palabra que siempre es cierta
Y que se esconde,
Como los alacranes bajo las rocas
Y se desliza
Por la atmosfera como un humo:
"¿Qué quieres que te diga?".Con un martillo deshoja el éter las margaritas de la imagen.
"No hablo signo o palabra, sino ese hálito sutil que alcanza mas lejos a las aves.
Soy el tamaño azul y verde y el río.".
Ah¡ Mad, que ventisca revuelve sin espacio ni aire!
Cuando teclean los zapatos la risa de los suelos,
Vienen las lagrimas que abandonaron los vagabundos;
Y bajo la mirada triste del pájaro sin presencia,
No hay animales mayores ya que los insectos.
Lo sabes. Claro que lo sabes.
Escucha:
"El aliento es una escalera
Y un silencio hecho de sal y paja
Y una aguja de acero o un bisturí.
El aliento es un aire frío."
Cuando contemplo tu extendido cuerpo,
Tus brazos cruzados en la baranda del límite,
Cerca yo de Madness, la tierra del desafío, donde había olvidado jugar,
Se me pierden los nombres y las olas se me quedan desnudas.
Dejadme llorando aquí.
Porque vienen pañuelos blancos y fotos ocres de los armarios,
Porque el aire del encinar es esa niña loca que ha perdido sus zapatos,
Porque si, dejadme, decías.
Porque se desvirtúa el proceso y las constantes, los hálitos, las esferas,
Y las margaritas de la imagen. Dime:¿Qué quieres?.
Caballo volador que traspasa la madreselva ¿hay lugar?
Es verdad. Cuando era pequeño recogía las botellas de las aguas,
Convergiendo con ellas en un deseo insatisfecho.
Dibujaba flechas de viento para el viento,
Noticia de las aguas para las aguas.
Anhelo de la mar que se desvahece,
Así.

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