Poemas a Prometeo-13

No esperes ni hilo de voz como respuesta,no mediría esa astucia tan corta vara
Dejará transcurrir el tiempo,alargando el silencio, buscando el largo límite de tus certidumbres.
Ella aguardando y tu, aguantandolo.
No permitas que te vea desocupado,sino actuando siempre, aún en tareas inaúditas,
más ejercitado y presto para la respuesta,cual si hubiese que tener lugar inevitable
Devuelve como pago la misma eficaz moneda,
dejando que el imparcial tiempo se erija como neutro juez de la tenacidad recíproca.
Habrás ganado el combate, si antes tiembla.
Si ella aguarda, tu, pues, aguanta.
Cuando el tiempo os alcance, en tal caso, bien podrías poner como honroso epitafio:
"No me fue permitido, por la mas astuta de las sirenas, alcanzar Ecbatana.
Pero hasta aquí la he traído con mis propias manos,
para que, liberados los otros y encerrada conmigo,
duerma, para siempre, tan formidable adversaria.".